África celebraba el pasado 31 de julio el día internacional de la mujer africana, bajo esta fecha movilizadora se alzan las banderas panafricanistas de la lucha por la liberación y emancipación de la mujer.
África celebra los años de luchas, batallas y victorias de la mano de mujeres que son el motor económico de este continente. En este día se lucha por objetivos como acceso a la educación, los derechos sexuales y reproductivos, la reconstrucción de la paz en zonas de conflicto, la liberación del continente africano, el acceso a independencia económica, o el reconocimiento de las mujeres como sujeto político clave, entre otros.
A continuación podréis conocer algunas de las mujeres que han marcado la historia de África:
Wangari Maathai: Nació en Kenya, logró aunar medio ambiente, feminismo y derechos humanos en su lucha. En 1977 fundó el Movimiento Cinturón Verde, gestionado por mujeres, para frenar la deforestación que estaba sufriendo Kenya. Consiguieron plantar 47 millones de árboles. Wangari fue nombrada ministra asistente de Medio Ambiente, y en 2004 le concedieron el premio Nobel de la Paz por su contribución al desarrollo sostenible, la democracia y la paz.
En Kenya y en Tanzania son muchas las mujeres que han conseguido dar pasos a favor de las mujeres. Durante nuestras rutas tenemos el placer de conocer personas de diferentes grupos étnicos, que nos dan una visión diferente de la vida.
Saara Kuugongelwa: Fue la primera Ministra de Namibia. Nacio en Otamanzi, Omusati. Se exilió con SWAPO en 1980 a la edad de 13 años y se fue a Sierra Leona en 1982. Asistió a Koidu Girls High Schools de 1982 a 1984 y a Saint Joseph’s , Tuvo la oportunidad de estudiar en la Universidad de Lincoln en Pennsylvania (EE. UU.), donde se graduó con un título en Economía. Junto con el presidente Hage Geingob, Kuugongelwa asumió el cargo de cuarto primer ministro de Namibia el 21 de marzo de 2015. Es la primera mujer en ocupar el cargo. Por eso es una figura tan reconocida en el país, por su lucha y perseverancia en llegar a alcanzar un puesto, que hasta el momento era exclusivo de hombres.
Vanessa Nakate: Comenzó a informarse sobre el cambio climático con 21 años de edad y un año más tarde comenzó a liderar el movimiento «Fridays For Future» en Uganda. También es la fundadora del movimiento «Rise Up», dedicado a amplificar las voces de las activistas africanas. A principios de 2020, recortaron a Vanessa de una fotografía de mujeres jóvenes activistas en el Foro Económico Mundial, lo que reforzó su determinación de promover las voces y experiencias de las mujeres africanas en las propuestas de actuación ante el cambio climático. Sin embargo la mejor manera de empoderarse las mujeres en Uganda, es a través de agrupaciones en las que la unión hace la fuerza y consiguen la escucha activa de otros miembros de las diferentes comunidades ugandesas. Nuestras rutas Gorila Trek son más que fauna y paisaje, son cultura e intercambio.
Cesária Évora:Nació en Mindelo en 1941, y fue una cantante conocida con el sobrenombre de la «Reina de la Morna» o la «la diva de los pies descalzos». Se presentaba descalza sobre los escenarios en solidaridad con los sin techo, las mujeres y niños pobres de su país. Comenzó haciendo conciertos para conocidos y familiares de la mano de su hermano, que la acompañaba como saxofonista.Pero su camino, en 1975 se vio truncado por los problemas sociales, políticos y familiares. Estos hicieron que dejase de cantar y se enfrentase a los que ella llamó sus «Dark Years» o volvió a lo grande y se convirtió en una conocida artista internacional a sus 47 años de edad. El blues caboverdiano de Cesária Évora en general habla de la larga y amarga historia de aislamiento del país y del comercio de esclavos, así como de la emigración. Un auténtico ejemplo de superación y lucha contra los problemas del día a día a los que se enfrenta toda una sociedad.
Nosotros apostamos por la igualdad, y porque un día el día 31 de julio se celebren solamente los logros. Actualmente nuestro equipo en Tanzania está creciendo y lo está haciendo de la mano de mujeres. En nuestras oficinas de Arusha podemos decir que la mayoría de trabajadoras ya son mujeres. Quizás para algun@s de vosotr@s esto no tenga importancia, pero la tiene en países donde la desigualdad es una gran desventaja en su día a día. También en nuestros campamentos y en nuestros vehículos, puestos tradicionalmente ocupados por hombres empiezan a estar ocupados también por mujeres. Entre ellas destacamos el trabajo de Dabrat, una fantástica profesional que ocupa el puesto de driver en algunos de nuestros viajes a medida. Dándoles a ellas la oportunidad de realizar este tipo de trabajo, pasan a tener un mayor poder dentro de su estatus familiar, dejando de ser dependientes de los hombres de la casa. Es un impulso tanto económico como social. Os dejamos con un proverbio africano con el que no podemos estar más de acuerdo: «Si las mujeres bajaran los brazos, el cielo se caería”.